Valencia, 8 de marzo de 2021.- Raquel Barba
Les Terres dels Alforins están en pie de guerra con las grandes empresas. Varios propietarios han recibido ofertas de arrendamiento para la explotación de sus propiedades para instalar parques eólicos y centrales fotovoltaicas, que romperían con la ecología del lugar.
Esta mañana Ramón Mora, propietario y uno de los afectados, ha estado en el programa A Buenas Horas, que presenta Miguel Ángel Pastor en la 107.1 Radio Intereconomía Valencia.
“Todo empezó en febrero. El propietario de una empresa holandesa vino a mi casa para ofrecerme un arrendamiento por 35 años a favor de 1.500 euros por hectárea para instalar centrales fotovoltaicas. A partir de ahí vimos que era cosa de todo el territorio”; así ha contado Ramón su experiencia con este tipo de empresas. Ante todo, ha querido aclarar que ellos no se oponen a las energías renovables, sino todo lo contrario: “En mi casa, como en muchas otras de la zona, la energía se genera a partir de placas solares. Al final es un valor que ofrecemos al cliente y nuestro compromiso con la naturaleza”.
El problema, entonces, viene dado por el impacto que tendría en el paisaje de la zona: “Els Alforins es la mayor extensión de viñedos de la denominación de origen valenciana. El paisaje, aparte de ser muy atractivo, para nosotros es economía. Cuando vendemos un vino, vendemos también un paisaje, un concepto, una obra de arte. Es un paisaje natural sin infraestructuras eléctricas y con muy poca densidad de población. Es la carta de presentación de nuestros vinos”, explica. Y este valor ecológico y cultural, parece que a estas empresas no les importa.
Y no solo eso. El contrato de arrendamiento que les han ofrecido resulta ser un regalo envenenado. “Resulta muy atractiva la oferta, pero hay que leer bien la letra pequeña. Contacté con mi abogado y me explicó que no era un contrato de 35 años, sino que era perpetuo porque la empresa podría modificarlo en cualquier momento e incluso revender”. Se han puesto en contacto con algunas organizaciones para tratar el tema, y mientras unas no parecen muy dadas a brindarles su apoyo, otras, como la dirección general de Política Paisajística y Territorial, sí: “Hay total colaboración y nos quieren ayudar. Están, como nosotros, a favor de las energías renovables, pero también hay que proteger el territorio”. Por el momento, el primer paso es informar a todos los propietarios sobre las condiciones reales del contrato.
Las zonas de la Font de la Figuera, Moixent y Fontanars dels Alforins cuentan con una gran extensión y riqueza de almendros, viñedos y olivos, y por eso es necesario protegerlos. “Fontanars dels Alforins sí está protegido”, asegura; “la Font de la Figuera está pendiente de aprobación del Plan General desde hace ya un año, y en Moixent el Ayuntamiento está iniciando un proceso para incorporar esa protección tan necesaria”.
Mientras tanto, los propietarios van a seguir peleando por mantener la integridad de su actividad económica: “Es una causa justa y hay empatía social. Vamos a movilizarnos desde todos los sectores para parar esto, porque queremos que todo el mundo disfrute del paisaje de Fontanars dels Alforins”.