Pasaporte COVID para restaurantes y locales de ocio con aforo superior a 50 personas, así como para visitar hospitales y residencias

– El president confía en que se autorice una medida «proporcional, necesaria y de urgencia» cuyo objetivo es «proteger la salud de la población y garantizar el derecho más fundamental de todos: el derecho a la vida»
– Además de en el interior de locales con riesgo de contagio y en centros con población vulnerable, también se exigirá el pasaporte COVID en eventos y festivales de música, en espacios cerrados o al aire libre, cuando no sea factible el uso de la mascarilla en todo momento
– El pasaporte podrá acreditarse con la vacunación completa, una PCR negativa en las últimas 72 horas, un test de antígenos en las últimas 48 horas o la superación de la enfermedad en los últimos 6 meses
– El jefe del Consell avanza que en breve se empezará a vacunar con la tercera dosis a personal sanitario, sociosanitario y personas mayores de 60

València El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha anunciado la decisión de solicitar al Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) la implantación del pasaporte COVID obligatorio para entrar en el interior de establecimientos de hostelería y restauración con aforo superior a 50 personas y también en locales de ocio y entretenimiento y espacios destinados a actividades recreativas y de azar con servicio de restauración con el mismo tipo de aforo, así como para visitar centros hospitalarios y residencias públicas y privadas.

Además, tal y como ha explicado, también se exigirá este pasaporte para acontecimientos, celebraciones y festivales de música, en espacios cerrados y al aire libre, cuando no sea factible el uso de la mascarilla en todo momento.

Ximo Puig ha comparecido, junto a la consellera de Sanidad y Salud Pública, Ana Barceló, tras la reunión de la Mesa Interdepartamental para la Prevención y Actuación ante la COVID-19, en la que se ha acordado esta medida, y ha expresado su confianza en que reciba la validación del TSJCV, porque, como ha argumentado, es «proporcional, necesaria y de urgencia» y tiene como objetivo «proteger la salud de la población y garantizar el derecho más fundamental de todos: el derecho a la vida».

Puig ha agregado que, con la implantación del pasaporte COVID, se busca «generar espacios más seguros» y «convencer y animar» a las personas no vacunadas «a que den el paso responsable y sensato que ya han dado 9 de cada 10 valencianos». «La libertad tiene unos límites. No existe el derecho a contagiar a los demás. No existe la libertad de saturar los hospitales», ha enfatizado.

El pasaporte podrá acreditarse con la vacunación completa, una PCR negativa en las últimas 72 horas, un test de antígenos en las últimas 48 horas o la superación de la enfermedad en los últimos 6 meses Y, si el TSJ autoriza esta solicitud, entrará en vigor al día siguiente de su publicación en el Diario Oficial de la Generalitat Valenciana y estará vigente durante un periodo de 30 días naturales, con la intención que abarque las fiestas navideñas y de Año Nuevo.

Cartel identificativo y régimen sancionador

En la entrada de los locales referidos habrá un cartel identificativo sobre la necesidad del pasaporte COVID y las personas que deseen acceder a ellos tendrán que presentar el certificado -en papel o en el móvil-, junto a su DNI o documento acreditativo de su identidad. No se conservarán los datos ni se generarán ficheros con ellos.

El incumplimiento de esta obligatoriedad estará sujeto al régimen sancionador específico de medidas de protección contra la COVID-19 que se aprobará próximamente a través de un decreto-ley, tal y como ha explicado el president, que ha pedido la colaboración de los cuerpos policiales estatales y locales para el control de estas medidas y ha avanzado que se convocará a tal efecto una reunión de la Junta de Seguridad en cuanto se obtenga la ratificación por parte del TSJCV.