- La síndica de Ciudadanos critica las subidas de impuestos previstas por el Gobierno central y aboga por recortar gasto en la Administración
Valencia, jueves 20 de mayo de 2021. La síndica de Ciudadanos (Cs) en Les Corts valencianas, Ruth Merino, ha exigido al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, que baje los impuestos y no convierta la Comunidad Valenciana “en un referente autonómico en asfixia fiscal”. Se ha pronunciado así en la sesión de control en la que ha preguntado “cómo van a afectar las próximas subidas de impuestos a la economía de los valencianos” y ha pedido a Puig que “haga lo posible por dejar atrás el infierno fiscal, a pesar de Pedro Sánchez”.
Ruth Merino ha explicado que la Unión Europea no exige subir impuestos, sino que obliga a “gestionar bien y a no tener un déficit y una deuda disparadas” y ha señalado que “la realidad es que la subida de impuestos del Gobierno la va a pagar, en un 84 por ciento, el conjunto de la población, sin diferenciar entre ricos o pobres”. “Un infierno fiscal para la clase media, para los emprendedores, para los autónomos y para las familias. Un infierno para afrontar la recuperación económica”, ha añadido.
En esta línea, la líder parlamentaria de Cs ha afeado a Puig que en lugar de “intentar aliviar este infierno fiscal, pretende convertir a la Comunidad Valenciana en un referente autonómico en asfixia fiscal”, ya que “tenemos el tipo marginal en IRPF más alto, somos la segunda comunidad donde más se paga por Sucesiones y Donaciones y todavía tenemos el impuesto sobre el Patrimonio”.
Al respecto, ha abogado por recortar gasto en la Administración, con menos consellers y menos asesores. “Las regiones con menor presión fiscal generan más competitividad, atraen más inversión, crecen más, retienen el talento y, en consecuencia, tienen menos paro”, ha afirmado Merino, quien ha lamentado que la Comunidad Valenciana ocupe el cuarto puesto en presión fiscal, sea líder en destrucción de empleo y la economía sumergida sea del 24,8 por ciento del PIB. Ante estos datos, el Consell, tal y como ha asegurado Merino, lo que pretende es la armonización fiscal, pero al alza.