– Las ayudas contemplan una dotación de 20 millones de euros para este año, pero pueden alcanzar otros 200 millones entre 2022 y 2023 si el sector aprovecha todos los recursos asignados a la Comunitat
– Ximo Puig afirma que el plan es la «punta de lanza» para «acelerar» las reformas vinculadas a la necesaria transición energética con la ayuda de los fondos Next Generation EU
– Héctor Illueca invita a participar en esta iniciativa a las empresas y profesionales de la edificación y destaca la necesidad de actuar «ante una parque envejecido cuyas carencias sufren las familias más humildes»
València. La Generalitat ha puesto en marcha un plan de ayudas con capacidad para movilizar 220 millones de euros entre este ejercicio y el de 2023 para actuaciones de mejora de la eficiencia energética en más de 17.000 viviendas, todo ello a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, financiado con los fondos europeos Next Generation EU.
Así se ha puesto de manifiesto durante el acto de presentación de estas ayudas para edificios y viviendas, que ha tenido lugar en el Palau de la Generalitat con la participación del president, Ximo Puig, y del vicepresidente segundo y conseller de Vivienda y Arquitectura Climática, Héctor Illueca.
El programa contempla ayudas para obras de rehabilitación con las se pueda acreditar una mejora de la eficiencia energética que represente, en el caso de actuaciones en edificios de viviendas, una reducción de, al menos, el 30 % en el consumo de energía primaria no renovable y, en el caso de las actuaciones puntuales en viviendas, una rebaja del 7 % de la demanda de esta energía.
Las subvenciones cuentan este año con un presupuesto de 20 millones de euros, que se puede ampliar, si son movilizados todos los recursos asignados a la Comunitat Valenciana, hasta alcanzar otros 200 millones de euros entre 2022 y 2023, con la activación de las iniciativas que lleve a cabo el sector de la edificación.
El president de la Generalitat ha afirmado que esta iniciativa es la «punta de lanza» para «acelerar» las reformas vinculadas a la necesaria transición energética, y ha reivindicado su importancia ante el «escenario extraordinariamente difícil» agravado por la crisis energética derivada de la guerra en Ucrania. «No podemos mirar más hacia otro lado», ha dicho el president, que se ha referido a la «gran oportunidad» que se abre con las ayudas Next Generation.
Una «causa común»
El responsable del Consell ha animado, por ello, a las empresas del sector de la eedificación a participar en estas actuaciones financiadas con fondos europeos, y a hacer de la eficiencia energética una «causa común». «Necesitamos producir más energía verde y ser más eficientes en la gestión de la energía», ha agregado.
Además, se ha mostrado partidario de actuar ante un parque de viviendas envejecido y de realizar todos los esfuerzos para que las ayudas presentadas lleguen a quienes tienen más dificultades para acceder a ellas, porque, como ha dicho, el sector de la edificación es clave para hacer de la vivienda un elemento de cohesión y también para crear puestos de trabajo.
Por su parte, el vicepresidente segundo y conseller de Vivienda y Arquitectura Bioclimática, Héctor Illueca, ha hecho un llamamiento a «las empresas, los profesionales técnicos y todo el personal implicado para movilizar el máximo de fondos posibles y aprovechar este momento para renovar y rehabilitar, conjuntamente, el parque edificado de la Comunitat».
Según ha resaltado, «una parte importante de nuestra sociedad siente los efectos de la climatología incluso dentro de sus casas». Tanto es así que «el 84,5 % de los edificios existentes se sitúan en los valores más bajos de la certificación energética en términos de consumo», una situación que «convierte a las personas que las habitan en extremadamente vulnerables tanto a las altas como a las bajas temperaturas», ha subrayado.
Por ello, ha coincidido con el president en la necesidad de actuar ante un «parque edificado envejecido cuyas carencias sufren las familias más humildes» de la sociedad y «combinar los estímulos económicos con actividades de futuro como la rehabilitación».
Características de las ayudas
Las ayudas están destinadas a financiar obras de rehabilitación en los edificios de uso predominante residencial, tanto en el ámbito urbano como rural, e incluyen la exigencia de una mejora acreditada de la eficiencia energética que afecta a los edificios de tipo residencial colectivo y viviendas unifamiliares o pertenecientes a edificios plurifamiliares.
Se prevén las figuras de agentes y gestores de la rehabilitación para facilitar tanto la ejecución de las actuaciones, como la canalización de la tramitación de las ayudas, que, en el caso de las comunidades de propietarios y propietarias, podrán ser de hasta 18.800 euros por vivienda (el 80 % de la actuación) o, en el caso de situaciones de vulnerabilidad, de hasta 26.750 euros por vivienda (el 100 % de la actuación).
El procedimiento de concesión será el de concurrencia competitiva, y su otorgamiento se efectuará siguiendo el riguroso orden de presentación de las ayudas. El plazo de presentación de las mismas se ha abierto precisamente este lunes, 11 de abril, y, para la convocatoria de 2020, finalizará el 1 de diciembre de 2022. Igualmente, el plazo que afecta al gestor o agente de la rehabilitación para solicitar la inscripción en los registros habilitados finaliza el 24 de noviembre del presente año.
Las obras podrán estar iniciadas antes de la solicitud de las ayudas, pero no podrán estar finalizadas en el momento de la petición, y además, deberán haberse iniciado con posterioridad al 1 de febrero de 2020.
