El presentador de “Caiga quien caiga”, actor y ahora en su faceta de escritor con su última obra “Bipolar y a mucha honra” ha repasado en Intereconomía Valencia uno de los capítulos más difíciles de su vida. “Llegué hasta el punto de quererme quitar la vida, pero con la ayuda de profesionales, con medicación y cuidándome mucho he conseguido revertir la situación”.
Fueron momentos duros, tal y como ha explicado Javier Martín, y un proceso costos de asumir y pasar. “Cuando tuve mi primera fase maníaca como estaba dentro de la manía estaba muy feliz en las realidades paralelas, pero cuando pasó el tiempo entendí que tenía que dejar cuidarme por mi entorno. Hay ciertos hábitos que mejoran esa calidad de vida como aceptar la medicación, no tomar drogas y tener mis horas necesarias de sueño”.
El humor y la familia fueron dos patas fundamentales en las que el escritor de “Bipolar y mucha honra” se ha apoyado. “El humor es algo que es una manera de desdramatizar lo que te pasa y cuando eres capaz de contar lo que te ha pasado, que es muy duro, desde esta vertiente estás sanando esa herida. Además, el entorno y la familia son muy importantes y entre ellos se tiran para ayudar de verdad”.
En este punto, Javier Martín apuntó con una gran sonrisa: “la palabra locura me encanta, porque hay una parte en ella que te hace sentir más cuerdo que nunca el haber pasado por ahí y me ha dado un estar en la vida diferente sintiendo la felicidad”.
Así pues, el autor de “Bipolar y a mucha honra” ha explicado respecto a su obra: “me ha movido escribir mi historia el a ver si contando mi historia puedo ayudar a alguna persona porque reconozco que a mí me va bien la medicación e ir al psiquiatra aceptando lo que te pasa con amor, aunque también denunciar el estado en el que está la salud pública”.
Por ello, Martín ha recalcado: “de la salud mental se ha empezado a hablar hace dos días, algo que también se ha aflorado por la pandemia. Ahora en España tenemos muchos problemas en decir que vamos al psiquiatra o que tomamos medicación, algo que es muy necesario para poner atención a la mente”.
Por último, Javier Martín ha reclamado a los medios de comunicación: “tienen mucho que aportar aquí, por un lado, empezar a dar una imagen diferente de los trastornos mentales y no como un delito, y sobre todo, para reivindicar más psicólogos, planes de lucha contra el suicidio o campañas de concienciación”.