Valencia, 11 de octubre de 2022- Xavi Cuenca
La comisaria de la exposición ‘Valencia, Porta al Disseny’ ubicada en el puerto de la ciudad, Inma Liñana, ha manifestado en el programa especial de Intereconomía Valencia que la muestra destaca los principales carteles y etiquetas que se diseñaron en el siglo XIX y XX que servían para enseñar los productos agrícolas típicos de nuestra tierra
“Valencia es la capital mundial del diseño y hay que destacar que aquí ya se hacía arte desde hace más de cien años y eso es lo que mostramos en esta exposición. Una manera de destacar el producto en el siglo XIX eran los carteles, en estos hay guiños al cine, a la salud, se quería presentar Valencia como un símbolo del exotismo por su clima”, ha declarado Liñana sobre la exposición que estará abierta desde el 3 de octubre hasta el 6 de noviembre.
En este sentido, en cuanto al contenido de la muestra, la comisaria ha apuntado: “Se arranca con un plano agrícola de mediados de 1.800 y se ven los orígenes de los caminos hacia al puerto. Hay fotografías donde se ven los procesos de traslado de productos, su calibrado, etcétera. Es maravilloso ver todo el itinerario de las naranjas. Había una intención de dar una buena imagen de Valencia y ofrecer nuestros productos a Europa”.
Sobre el proceso de elección de las etiquetas y fotografías de la exposición, Inma Liñana ha expresado: “Hay muchos meses de selección de fotografías porque se publicaron más de 3.000. En la exposición hay unas 300 etiquetas en su mayoría de naranjas pero también de otros productos agroalimentarios como melones, cebollas o uva moscatel”.
El cuanto a los motivos que han llevado a la dirección de la exposición a la elección de la imagen principal, su comisaria ha remarcado: “Había que conectar con el lugar de destino, bien con imágenes tradicionales de aquí, o bien con guiños a los productos del lugar de destino utilizando su lenguaje. La imagen de la exposición tiene todos los elementos: aparece la mujer, las naranjas, los cajones preparados para embarcar, el mar y el vapor del barco”.
Así pues, en referencia a la manera en la que se muestra este contenido, la comisaria ha explicado: “La exposición está estructurada en tres secciones: la primera es de naranjas, la segunda de vinos y licores y la tercera es de productos actuales que siguen exportándose como una cerveza artesanal que triunfa en Corea y la cerámica. Hay azulejos de la producción local que reflejan las viñas y los naranjos, y otros en los que aparecen carpas que hacen referencia a Asia”.
“Se empezó a trabajar hace tres años pero con la pandemia se aparcó. Ester Medán, que es historiadora del arte y es la cabeza pensante de todo esto, lleva trabajando en ello muchos meses. Todas las etiquetas son originales en perfecto estado de conservación. Hay material de apoyo que nos lo han prestado y hay que agradecerles la colaboración”, ha continuado Liñana.
Acerca del interés que ha suscitado la exposición ‘Valencia, Porta al Disseny’ en los más pequeños, la comisaria ha afirmado: “Hay una zona lúdica dedicada a los más jóvenes donde proponemos actividades para los niños en las que tenemos dibujos para colorear para que sea una experiencia agradable y didáctica. Tenemos continuas visitas de grupos escolares y se les hace un recorrido atendiendo a sus preguntas. Se les explica nuestra historia y les fascina. Algunas imágenes les resultan familiares”.
Por otro lado, sobre la curiosa historia que cuenta que la Cocacola podría tener sus orígenes en tierras valencianas, Inma Liñana ha aseverado: “A mediados de 1800 se presentó en una feria de Filadelfia un jarabe higiénico de Aielo de Malferit con nuez de cola. Al año siguiente apareció la Cocacola con una base exactamente igual pero los americanos le añadieron agua carbonatada, aunque el sabor es el mismo. Se piensa que la Cocacola se inspiró en el jarabe de Aielo”.
“También se dice que poco después de la feria los americanos vinieron a Aielo de Malferit a comprar la patente por la cual pagaron 30.000 pesetas, que en aquella época era mucho. No está certificado pero se va contando en el pueblo, hay historias que lo abalan”, ha proseguido la comisaria de la muestra donde se expone la botella que se dice que es el inicio de la famosa bebida.
Por último, a modo de agradecimiento, Inma Liñana ha concluido: “Ha habido muchas ganas de los prestadores y coleccionistas de compartir todo el material. Hacen la labor de salvar estas piezas y no hay nada más gratificante que compartirlo al público. El visitante tiene mucha emoción, nos visitan muchas familias de naranjeros que les toca muy de cerca”.