El retraso en la vacunación y la ausencia de un plan para reactivar la movilidad están lastrando las pérdidas del sector muy por encima de las previsiones realizadas.
Valencia, 30 de marzo de 2021
El sector hotelero y del alojamiento turístico ya ha cuantificado la cantidad necesaria para su rescate con cargo al Fondo Covid19 de 11.000 millones de euros que el Gobierno de España repartió a las Comunidades Autónomas el pasado viernes y que corresponden 647 millones a la Comunitat Valenciana,
En una carta remitida ayer al president de la Generalitat, Ximo Puig, esta asociación valora en 300 millones la cantidad necesaria para hacer frente a las incalculables pérdidas que está sufriendo el sector: 200 millones de euros que ya se contemplaban en la primera propuesta hecha por HOSBEC para paliar pérdidas de 2020 y 100 millones de euros adicionales que corresponderían a las pérdidas del primer semestre de 2021, habida cuenta que no se ha reactivado la movilidad ni nacional ni internacional ni existe plan alguno para hacerlo en el corto o medio plazo.
El presidente de HOSBEC ha destacado que, “en estos momentos, la industria hotelera y del alojamiento turístico es de las pocas áreas de actividad que está casi totalmente paralizada por los efectos del Covid19.” Y es que mientras que otros sectores ha podido abrir sus puertas y empezar a trabajar, aunque sea parcialmente, “el 40% de la planta hotelera lleva cerrada a cal y canto desde hace 12 meses, aunque las pérdidas empezaron a generarse mucho antes con las múltiples cancelaciones de reservas, eventos etc.. que se fueron sucediendo desde el mes de enero de 2020, antes del estado de alarma”.
Para esta asociación, “ha llegado el momento de la acción porque de no hacerlo, las consecuencias serán irreparables. Además, las perspectivas no son nada favorables para las próximas semanas e incluso meses, con una vacunación a un ritmo frustrantemente lento y con una amenaza de cuarta ola de contagios que poco tendrá que ver con la actividad turística pero que nos condenará a mantener las empresas cerradas”.
Para Toni Mayor ya no son válidas actuaciones de “tirar a bulto o utilizar la brocha gorda, sino que se debe diseñar un plan de rescate selectivo, esto es, para compensar pérdidas de empresas. Todo lo que se haga debe ser proporcional a los daños“. Tienen que aplicarse criterios de justicia para ayudar a los que de verdad están teniendo pérdidas. Este plan de rescate se debería aplicar a las empresas hoteleras y de alojamiento viables que justifiquen una caída de ventas superior al 50% respecto a 2019 y que debería cubrir el pago de entre el 60-80% de los gastos que se han tenido que asumir de forma ineludible durante los últimos doce meses y hasta la fecha en la que se pueda retomar la actividad turística sin restricciones.
Además, se tiene que tener en cuenta en el diseño la estructura de las cadenas hoteleras: los límites se deben establecer por establecimiento o centro de trabajo, no por mercantil, porque de no hacerlo así una cadena hotelera recibiría la misma cantidad máxima que un hotel independiente.
Entre los gastos que deben compensarse se encuentra los gastos de personal y cotizaciones de ERTES, mantenimientos, facturas de electricidad, agua y gas aunque el consumo sea inexistente, impuestos, arrendamientos o cargas hipotecarias. Estas condiciones se deberían justificar con cargo a las declaraciones de IVA o impuesto de sociedades para no seguir ayudando a empresas que hubieran podido tener ingresos suficientes durante este periodo de pandemia.
En la actualidad y a pesar de que han transcurrido ya más de doce meses, la actividad hotelera es muy residual en la Comunitat: apenas está abierta durante esta semana el 30% de la oferta y se trabaja con ratios de ocupación muy bajos, sin que vaya a superar el 50% de media durante la Semana Santa. Fuera de este periodo vacacional, los datos son mucho más desoladores: el cierre afectará al 80% de los hoteles y las ocupaciones medias caerán por debajo del 20% para los que permanezcan abiertos.
Por ello el sector hotelero y el alojamiento turístico tiene que ser prioritario en este plan de ayudas. Siguiendo las recomendaciones tanto del Parlamento Europeo como del propio Gobierno de España, el diseño que haga el Consell debe priorizar a los hoteles como receptores de estas ayudas para garantizar su supervivencia hasta el final de la crisis sanitaria.