·El presidente de CaixaBank ha subrayado que las debilidades de la economía española están suficientemente diagnosticadas, y que lo que falta “es la implementación de las medidas necesarias para enfrentarnos a las mismas”.
·Goirigolzarri: “La digitalización y el equipo humano son las palancas que nos ayudarán a seguir prestando un servicio eficiente y de gran calidad a nuestros clientes, aportando financiación a familias, pymes y empresas, porque este es el mejor modo que tenemos para apoyar la recuperación socioeconómica de nuestro país”.
Alicante. 23 de septiembre 2021
El presidente de CaixaBank, José Ignacio Goirigolzarri, ha asegurado este jueves que es fundamental llevar a cabo una excelente gestión de los fondos europeos Next Generation, porque “nos encontramos ante una oportunidad única para revertir las debilidades estructurales de la economía española”.
Durante su participación en el ‘III Fórum Excelencia Directiva’, organizado por el Círculo de Directivos de Alicante, Goirigolzarri ha apuntado que, aunque “todavía hay que ser cautos con los escenarios macro de la pandemia, estamos en una fase de recuperación que tendrá un gran brío”.
“Nunca, en mi vida profesional, he vivido la posibilidad de salir de una crisis con un proceso de transformación financiado por unos fondos excepcionales y externos como son los Next Generation. Por tanto, nos encontramos ante una oportunidad única para atacar las vulnerabilidades crónicas de nuestra economía”, ha incidido.
En este sentido, Goirigolzarri ha subrayado que las debilidades de la economía española están suficientemente diagnosticadas, y que lo que falta “es la implementación de las medidas necesarias para enfrentarnos a estas debilidades”.
Así, ha advertido de que la principal debilidad de la economía es su baja productividad, “si bien apoyándonos en los fondos europeos podemos revertir esta situación” y situar este indicador más próximo al que registran otros países de la Unión Europea.
Goirigolzarri ha señalado que la mejora de la productividad debe basarse en políticas de oferta que son sinónimo de “reformas de calado, como el sistema laboral, el sistema de pensiones o las regulaciones que no propician la creación de nuevas empresas y establecen barreras a una sana competencia”.
El presidente de CaixaBank ha afirmado que la utilización de los fondos europeos tiene que tener una visión “amplia y no cortoplacista”. “Entiendo que es tentador su utilización para conseguir crecimientos en el corto plazo, pero debemos tener una visión más estratégica y asegurar que su utilización mejora la productividad de nuestra economía en el medio y largo plazo”, ha apuntado.
Es fundamental, según Goirigolzarri, que los fondos procedentes de la Unión Europea se gestionen “con una enorme transparencia”, tanto en su propia inversión como en los resultados e impacto que generen en la sociedad. “No debemos olvidar que España es un país de pymes, y a ellas deben llegar los fondos”, ha remarcado.
Educación y formación contra la desigualdad
En el proceso de transformación al que se enfrenta la economía española en los próximos años, Goirigolzarri ha advertido de que habrá sectores que deben disminuir su perímetro, al tiempo que se va a producir “un cambio muy relevante en la asignación de recursos y consiguientemente en el empleo”. “Esto nos lleva a un reto clave para el futuro de nuestra sociedad, que es la educación y la formación a lo largo de toda la vida profesional”, ha subrayado.
El presidente de CaixaBank ha añadido que, aunque esta situación afecta especialmente a los jóvenes que están siendo los más vulnerables, está implicada toda la población, “lo que requiere una permanente actualización de habilidades para desarrollarse en un mercado de trabajo en permanente y creciente cambio”.
“El desempleo es la principal causa de las desigualdades sociales y la mejor medicina para reducir el desempleo es la formación y la educación. Las empresas debemos asumir nuestra responsabilidad y ser mucho más protagonistas, por ejemplo, en la formación dual, en la que estamos muy lejos de las prácticas centroeuropeas”, ha reconocido.
Transformación digital al servicio de las personas
El presidente de CaixaBank se ha referido también a los importantes retos que afronta el sector financiero, como son la baja rentabilidad por los bajos tipos de interés y los grandes retos estratégicos como consecuencia de los procesos de digitalización y el cambio de hábitos de los clientes y de un entorno de enorme competencia.
“Los bancos estamos tremendamente impactados por la transformación tecnológica. Pero hay que verlo como una oportunidad. La tecnología es un gran aliado para nosotros, ya que nos permite dar un mejor servicio a nuestros clientes a la vez que mejora la eficiencia de nuestros procesos”, ha explicado Goirigolzarri.
Para que esta transformación digital acabe creando valor en el medio plazo, ha destacado, “es necesaria una regulación que acompañe a estos cambios, bajo la premisa de que la regulación, las reglas de juego, han de ser las mismas para todos los jugadores que realicen la misma actividad, con independencia de su sector de origen, ya que lo contrario generará arbitrajes regulatorios, que en el pasado hemos visto que son una fuente de desestabilización del sistema financiero mundial”.
Goirigolzarri ha manifestado que, a futuro, “por mucha virtualización que tengamos, las personas seguirán siendo clave” porque los clientes van a seguir demandando una relación personal, “que tendrá su máximo valor en la asesoría y contratación de productos y las personas seguirán jugando un papel clave en la diferenciación entre las buenas y las malas entidades”.
“La digitalización y el equipo humano son las palancas que nos ayudarán a seguir prestando un servicio eficiente y de gran calidad a nuestros clientes, aportando financiación a familias, pymes y empresas, porque este es el mejor modo que tenemos para apoyar la recuperación socioeconómica de nuestro país”, ha subrayado.
El presidente del banco ha recordado que hace ahora justo un año se aprobó la fusión de CaixaBank y Bankia, una operación que, sin duda, ha colocado a la entidad resultante en “una posición de claro liderazgo en la banca española, con un modelo de distribución único y una gran fortaleza financiera, que nos ayudará a seguir estando muy cerca del mundo empresarial, de nuestros clientes y de la sociedad en su conjunto” y, con el objetivo de “dotarnos de las capacidades necesarias para liderar el proceso de transformación que se está produciendo en nuestro sector”.