Valencia, 24 de febrero de 2022- Diego Varea
El expresidente de la Generalitat Valenciana y referente en el Partido Popular, Francisco Camps, ha manifestado en Intereconomía Valencia respecto a la crisis del partido que “toda la estructura nacional no era tan sólida porque si no es imposible que todo esto ocurra de forma vertiginosa. Además, ha habido cierre de filas con unidad de criterio para que haya otro presidente al frente del partido, algo que hay que valorar positivamente”.
En esta misma línea, el expresidente de la Generalitat ha expuesto: “ya hay un acuerdo para poner en marcha la sucesión de Pablo Casado e intentar que haya un candidato único como Feijóo, por lo que el partido quería un cambio”. Y en temática del congreso extraordinario, Camps ha indicado: “estaba convocado para julio y se ha adelantado a abril. La democracia interna es crisis y solución con voto, algo que fortalece al partido y al sistema”.
Así pues, en vistas de los posibles cambios en las direcciones autonómicas, Francisco Camps ha abogado: “el cambio es una expectativa colectiva para mejorar nuestros resultados en las elecciones autonómicas y generales. Yo tengo claro que debemos apoyar y dar empuje a la figura de Feijóo, un político que ha mantenido su liderazgo en Galicia con tres presidentes del Gobierno diferentes”.
De hecho, respecto a la relación del propio Camps con Alberto Núñez Feijóo, el militante del PP ha apuntado: “hemos coincidido los dos siendo presidentes de nuestras autonomías, somos de la misma generación y coincidimos también en nuestros puestos de la Administración General del Estado. Yo voy a seguir estando a disponibilidad del partido siempre para lo que se me necesite”.
En un repaso a la política general, el expresidente de la Generalitat ha fundamentado: “yo empecé con 27 años en el ayuntamiento nacional y pasé por todos los puestos posibles, excepto por la alcaldía de Valencia, hasta llegar a la Generalitat. Al inicio de la democracia hubo una escalada de puestos de los grandes dirigentes nacionales para conocer la Administración y las Instituciones, y a partir del año 2011 con Zapatero se produjo una quiebra en ello y así nos fue”.
Por último, Francisco Camps ha abogado: “a mí me gustaría que las elecciones generales y autonómica tuviesen una cadencia inalterable como las municipales para dar una estabilidad al sistema, y a la vida de la sociedad, y porque 4 años es un periodo suficiente para poner en marcha grandes proyectos”.