Valencia, 29 de septiembre de 2022 – Jesús Lorda
El economista Fernando Martínez ha manifestado en Radio Intereconomía Valencia sobre la rebaja de impuestos anunciada por el president de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig: “Se ha lanzado un sprint para conseguir votos. Luego vamos a ver si esta medida fiscal va a seguir más allá de mayo de 2023, y luego veremos si se puede prorrogar a partir de esta fecha, venga quién venga”.
En todo caso, ha explicado que una rebaja de impuestos puede hacer que aumente la circulación monetaria: “Vamos a ser más ricos y vamos a tener más dinero disponible para gastar. Estamos en un estado de felicidad fiscal y estas navidades van a ser imparables”
En materia geopolítica ha explicado: “El corte de gas a Alemania va a tener sus consecuencias, porque va a intentar reducir su consumo en hogares para redirigirlo hacia la industria pero el corte del Nord-Stream es otro problema para el país”.
“Alemania no tiene asegurada una continuidad productiva como la que tienen hasta ahora”, ha explicado Martínez. Además, ha declarado que una bajada del 1,5% del IPC es buena, pero que hay que estar atentos para ver si sigue bajando con el paso de los meses.
“Hay que tener en cuenta que desde el mes de junio se han ido tomando muchas medidas. Ha habido una tendencia hacia arriba de los precios del petróleo y las materias primas han empujado hacia arriba el IPC”, ha contextualizado el economista la subida del IPC y la ligera bajada hasta la situación actual.
A pesar de ello, Martínez ha apuntado: “El ahorro de todos nosotros ha bajado un 7%. Nuestro consumo nos está costando más y estamos tirando de ahorros para hacer frente al incremento de precios”.
“El mantenimiento del nivel medio de consumo viene del ahorro”, ha añadido el economista, que además ha recalcado: “Si se llevan a cabo los planes fiscales que van a castigar más el ahorro, mucha gente va a ir a no tener nada en el banco y gastarlo todo”.
Sobre si la inflación va a bajar hasta final de año, el economista ha analizado: “Vamos a un periodo tradicionalmente inflacionista, que es el último trimestre del año, porque la gente tiene la paga extra y gasta. Acabar con un IPC de unos 8,5 puntos a final de año sería un éxito”.
“Que baje otro punto y medio sería un éxito, no vamos a estar muy por debajo de estas cifras”, ha añadido Martínez respecto a esta cuestión y además ha recordado: “Si vamos a subir un 3,5% a la masa salarial de los funcionarios, el mercado prevé que hay más dinero para gasto y eso no hace que la inflación baje”.