El sector agrario valenciano saldrá a la carretera el 3 de diciembre para reclamar medidas ante la escalada histórica de costes y la crisis de precios

Valencia, 26 de noviembre de 2021

Las organizaciones profesionales  agrarias de la Comunitat Valenciana –la Asociación Valenciana de Agricultores  (AVA-ASAJA), ASAJA Alicante-Jóvenes Agricultores, La UNIÓ de Llauradors i  Ramaders, la Coordinadora Campesina del País Valencià (CCPP-COAG) y la Unión  de Pequeños Agricultores y Ganaderos del País Valencià (UPA-PV) – han acordado  la convocatoria de una manifestación el próximo viernes 3 de diciembre para  reclamar medidas de apoyo a todas las administraciones ante la escala histórica de  los costes de producción y la crisis de precios en origen.  

El acto de protesta consistirá en una marcha de personas y vehículos (tanto  turismos y furgonetas como maquinaria de uso agrícola) que discurrirá desde las  poblaciones de Favara hasta Tavernes de la Valldigna. En esta zona fue  precisamente donde empezó el mal inicio de la campaña de la naranja Navelina, que  posteriormente se ha extendido al resto de áreas citrícolas, la cual registra 

cotizaciones ruinosas de hasta 0,15 euros por kilo que están muy lejos de cubrir los  gastos, debido a la entrada masiva de importaciones foráneas y a los abusos  comerciales de determinadas cadenas de distribución.  

Estas comarcas también concentran la mayor producción de caqui en Europa,  un cultivo cuya rentabilidad está contra las cuerdas a causa de la falta de soluciones  para combatir las plagas y enfermedades. Asimismo, la reivindicación remarca los  daños en expansión que está ocasionando el Cotonet de Sudáfrica –200 millones de  pérdidas en la presente campaña citrícola– en las clementinas, principalmente en el  sur de Castellón y norte de Valencia.  

Con todo, las organizaciones agrarias convocantes de la movilización invitan  a participar a todas las personas afectadas directa o indirectamente por la grave 

crisis de rentabilidad que soportan la gran mayoría de las producciones agrícolas  (uvas, aceite, arroz, frutas de hueso, toda clase de hortalizas…) y ganaderas  (porcino, vacuno, avícola, ovino-caprino, cunícola y apícola) puesto que el acto de  protesta hace referencia a la problemática general del sector agropecuario. 

Las entidades representativas del campo valenciano alertan de una subida sin  precedentes de los costes de producción en la agricultura y la ganadería. La energía  eléctrica –necesaria fundamentalmente para extraer el agua de riego– se ha  encarecido un 270% y muchas entidades de riego se ven abocadas a renovar sus  contratos con las comercializadoras mediante incrementos inasumibles. El gasóleo  que usan los tractores y otras máquinas agrarias ha subido un 73%, así como los  abonos (+48%), el agua (+33%), los plásticos de invernadero (+46%) o las semillas  (+20%). En el apartado de la ganadería, el encarecimiento del 20% de los piensos  para alimentación animal lastra la competitividad de las explotaciones.  

Mientras los alimentos empiezan a experimentar un encarecimiento para los  consumidores, al principio de la cadena alimentaria los productores no tienen la  capacidad de repercutir la histórica escalada de costes en los precios que perciben.  Por ello, además de apoyos coyunturales, el sector agrario exige que la reciente  reforma de la Ley de la Cadena Alimentaria sirva verdaderamente para evitar  prácticas comerciales abusivas y garantice precios justos para los productores.  

Asimismo, las organizaciones agrarias reivindican una Política Agrícola  Común (PAC) más mediterránea y una profunda revisión de los acuerdos  comerciales de la Unión Europea con países terceros, empezando por la actual  revisión del tratado con Sudáfrica, a fin de establecer reciprocidad en las  condiciones de producción, mayores controles fitosanitarios y la declaración de  ‘producto sensible’ a aquellos cultivos cuya rentabilidad se vea perjudicada.  

El sector agrario valenciano no descarta la convocatoria de más actos de  protesta durante las próximas semanas, así como la participación en una gran  manifestación en Madrid de agricultores, ganaderos y ciudadanos en defensa de un  medio rural sostenible desde el punto de vista ambiental, social y económico.