Valencia, 21 de enero de 2022
La portavoz del PP, María José Catalá, ha anunciado que se ha presentado una moción al pleno donde se exige al Gobierno de Ribó y PSOE que retiren y paralicen el Reglamento Mordaza que va a anular la labor de fiscalización de la oposición pues se trata de “una nueva cacicada del Gobierno de Ribó y PSOE”. Los populares pedirán que se redacte un nuevo reglamento ajustándose a las recomendaciones realizadas por el Sindic de Greuges ante la denuncia del PP. El PP también estudia acudir a los tribunales si el Gobierno de Ribó y PSOE sigue adelante con este reglamento mordaza
En la recomendación del Sindic se recogía que “ teniendo en cuenta los principios recogidos en el Reglamento de Gobierno Abierto que resultan de aplicación a todo el ámbito de actuación municipal, se aplique la regulación de las preguntas prevista en el Reglamento Orgánico del Pleno de la forma más favorable al ejercicio del derecho fundamental a participar en los asuntos públicos (artículo 23.1 de la Constitución Española), con la finalidad de potenciar este procedimiento de control y transparencia y mejorar su funcionamiento práctico para evitar las disfuncionalidades detectadas”.
“Esperamos que el Gobierno de Ribó y PSOE de marcha atrás en un nuevo reglamento que quiere anular el trabajo de fiscalización de la oposición al Gobierno. Un reglamento que impide preguntar y que reduce la posibilidad de presentar iniciativas en las comisiones o que nos obliga a realizar sólo una cuestión o interrogante por pregunta”.
El PP ha denunciado “la mordaza” del Gobierno de Ribó y PSOE sobre el trabajo de fiscalización de la oposición. Van a aprobar un cambio del ROP (Reglamento Orgánico del Pleno) donde se limita las preguntas, mociones, asuntos a preguntar y cómo debe preguntarse. Sólo se admite una cuestión o interrogante por pregunta que debe ser “escueta y estricta”.
“Ribó y PSOE van a pasar a la historia como el gobierno menos transparente y más totalitario de la democracia al tratar de frenar y anular la labor de fiscalización de la oposición. Lo que nunca hicieron los gobiernos del PSOE y PP en el Ayuntamiento lo va a poner en marcha el actual”, advirtió la portavoz del PP, María José Catalá, quien con este reglamento mordaza se va a limitar el trabajo de fiscalización.
Entre las modificaciones previstas del ROP se incluye eliminar las cinco preguntas adicionales por grupo en el pleno y se limita a tres peguntas en las comisiones por concejal, y sólo podrá hacerlo el edil que sea miembro de la misma. Hasta ahora no había limite en las comisiones y podía hacerlo cualquier concejal aunque no estuviera en la misma.
También limita a dos las mociones que cada grupo municipal pueda presentar en cada una de las comisiones, en el anterior reglamento no existía ninguna limitación al número de mociones.
Pero la mordaza va a más: un concejal tendrá que esperar seis meses para poder preguntar por un mismo asunto, limitando de esta manera los temas por los que se pueden preguntar. El mismo reglamento que va a modificar el gobierno de Ribó y PSOE también fija como deben realizarse las preguntas, y que deberán ser escuetas con un solo interrogante por pregunta con una “escueta y estricta formulación de una sola cuestión o interrogante (artículo 131.2)”.
Catalá señala que se trata de “un ROP mordaza que quiere anular a la labor de la oposición en el Ayuntamiento. Ahora este reglamento que es más propio de gobierno de un gobierno bananero que de un gobierno que vino argumentando que iban a ser transparentes”.
Esta modificación llega tras la resolución del Sindic de Greuges por la queja del Grupo Popular al negarse el Gobierno de Ribó y PSOE a contestar a las preguntas del PP. Ahora, Ribó y PSOE no ha hecho ningún caso de la recomendación y van a modificar el ROP sin atenderla, pues han hecho todo lo contrario.
El Sindic decía en su recomendación que “teniendo en cuenta los principios recogidos en el Reglamento de Gobierno Abierto que resultan de aplicación a todo el ámbito de actuación municipal, se aplique la regulación de las preguntas prevista en el Reglamento Orgánico del Pleno de la forma más favorable al ejercicio del derecho fundamental a participar en los asuntos públicos (artículo 23.1 de la Constitución Española), con la finalidad de potenciar este procedimiento de control y transparencia y mejorar su funcionamiento práctico para evitar las disfuncionalidades detectadas”.
Catalá asegura que “esta estrategia de Ribó y PSOE demuestra su opacidad y falta de transparencia al limitar nuestra labor de fiscalización al Gobierno, y pasarán a la historia como el gobierno más totalitario desde que llegó la democracia a Valencia”.