– Las centrales de prevención de incendios forestales participaron en un total de 294 casos y los agentes medioambientales realizaron control de accesos a parques naturales y terrenos forestales
– Durante todo el episodio de emergencia por calor se registraron 1379 rayos y se contabilizaron 22 incendios, 14 de ellos forestales
El operativo por ola de calor de la Conselleria de Emergencia Climática movilizó a más de 500 personas que realizaron acciones de vigilancia preventiva, control de humos, seguimiento de tormentas, actuaciones informativas, o precintado de paelleros, entre otras, dentro de la campaña de intensificación de las tareas de vigilancia y prevención de incendios forestales.
El dispositivo -en funcionamiento tras la publicación de la resolución conjunta con la Conselleria de Justicia, Interior y Administración Pública- activó, junto con los agentes medioambientales y los técnicos de guardia, los 66 observatorios forestales y las 122 unidades de prevención.
Entre el 12 y el 16 de agosto las centrales de prevención de incendios forestales participaron en un total de 294 casos (97 Alicante, 62 Castellón y 135 Valencia) mientras que los observatorios forestales realizaron 28 actuaciones por control de humos y 56 seguimientos de tormentas, detectando 14 incendios y 5 quemas.
Los agentes medioambientales realizaron control y limitación de accesos a parques naturales y terrenos forestales, además de desalojar las zonas de acampada en cumplimiento de la resolución conjunta que suspendía los permisos de dichas zonas en los montes gestionados por la Generalitat. De forma preventiva, y con la colaboración de la Federación d’Escoltisme de la Comunitat Valenciana, se desalojaron los tres campamentos de Sant Joan en Vistabella.
Las unidades de prevención de Incendios realizaron 642 actuaciones informativas y 122 fueron correctivas, informando a un total de 2944 personas. Se precintaron 138 paelleros, se hizo el seguimiento de 47 tormentas y se detectaron 22 incendios.
La Unidad Técnica 902 prestó el apoyo técnico en remoto en el incendio forestal de Ayódar del sábado 14 y estuvo presencialmente en el incendio de Azuébar durante el domingo 15 y lunes 16 de agosto.
Un rayo, origen del fuego en Azuébar
El 14 de agosto la ola de calor dejó máximas de hasta 46 ºC en las zonas de interior y en
las zonas de influencia marina las máximas estuvieron en torno a los 35ºC. El domingo 15 de agosto se registraron temperaturas cercanas a los 40ºC incluso en algunas zonas de costa.
Las previsiones de AEMET apuntaban la posibilidad de tormentas secas, con la consiguiente caída de rayos y por tanto igniciones simultáneas de incendios debido a las escasas precipitaciones previstas. En este sentido, durante todo el episodio se han contabilizado 1379 rayos, con la distribución diaria que se puede ver en el mapa y la tabla adjuntas en la imagen.
En total se registraron 22 incendios, 14 de ellos forestales, siendo el de mayor envergadura el de Azuébar, que afectó también a los términos municipales de Soneja y Almedíjar. La causa del incendio de Azuébar fue un rayo que cayó sobre un pino, según el informe elaborado por el Grupo Operativo de Investigación de Incendios Forestales (GOIIF).
Los rayos fueron el origen también de otros siete incendios forestales de menor envergadura registrados entre el 13 y el 16 de agosto con una superficie total afectada de 9,8 Ha.
Azuébar y Soneja contaban con el Plan Local de Prevención de Incendios Forestales aprobado
Los planes locales de prevención de incendios son un instrumento complementario a los Planes de Prevención de cada Demarcación Forestal esencial que deben elaborar los municipios (y de carácter obligatorio según la Ley 3/1993 Forestal) para articular una respuesta adicional frente al fuego adaptada al territorio, y en concreto adaptado a las singularidades que puedan existir a nivel local.
Azuebar y Soneja cuentan con el plan local aprobado que permite tener localizadas las diferentes infraestructuras de prevención de incendios forestales que existen distribuidas por el municipio y que resulta esencial para la toma de decisiones, distribución de los efectivos al Puesto de Mando Avanzado (PMA) y adopción de medidas eficaces para controlar las llamas, que en esta ocasión han arrasado 420 ha de terreno forestal.
Por ese motive desde la Conselleria se ha venido desarrollando una política de impulso y acompañamiento que ha multiplicado los PLPIF que ya suman 298 (de los que 248 se han aprobado en 2020 y 2021) y otros 134 se encuentran en tramitación.