· Las farolas se encargaron en 1999 a imitación de las instaladas en la Alameda con motivo de la Exposición Regional Valenciana de 1909.
· Además de su restauración, los populares pedían la protección integral de las luminarias ante eventuales actuaciones que desfiguren su estética.
Valencia, 6 de octubre de 2021
El Gobierno de Ribó y el PSOE rechazó ayer la moción pre-sentada por el Grupo Municipal Popular para restaurar las 60 farolas que se instalaron en 1999 en el Paseo de la Alameda en conmemoración de la Exposición Regional celebrada en Valencia en 1909. Con el paso del tiempo, las luminarias han ido deteriorándose, como consecuencia de la falta de mantenimiento por parte del Ayuntamiento, presentando grafitis, manchas de óxido y desconchados en la pintura. Es por ello por lo que los populares presentaron una iniciativa al pasado Consejo de Distrito de Exposición para proceder a su inmediata recuperación.
El Grupo Municipal Popular instaba, en su moción, “a la Concejalía de Gestión de Recursos a restaurar y a mejorar el mantenimiento de las farolas modelo Exposición existentes en el tramo histórico del Paseo de la Alameda, declarado Bien de Relevancia Local”. Los populares reclamaban igualmente, esta vez a la Concejalía de Desarrollo Urbano, “incluir las citadas luminarias entre los elementos protegidos de los jardines del Paseo de la Alameda en atención a su valor patrimonial, modificando a tal fin la ficha pormenorizada del Catálogo de Bienes y Espacios Protegidos de la ciudad de Valencia”.
En el año 1999, el Ayuntamiento de Valencia encargó, a través de la Concejalía de Alumbrado y Fuentes Ornamentales, la realización de 60 farolas modelo Exposición para el histórico Paseo de la Alameda, entre los Jardines del Real y la Plaza Zaragoza, a imitación de las instaladas en esta misma ubicación con motivo de la Exposición Regional Valenciana de 1909. Promovida y financiada por Tomás Trénor y Palavicino, a la sazón Presidente del Ateneo Mercantil, en ella se expondrían los últimos avances tecnológicos del momento, alumbrándose igualmente el que se convertiría, años más tarde, en el himno oficial de la región. 40.000 lámparas incandescentes iluminaban por la noche el recinto ferial,despertando la admiración de los vecinos de las poblaciones cercanas
Formadas por tres brazos y globos de vidrio bufado, las luminarias están lacadas en color blanco, en consonancia con las fuentes en fundición de hierro que cierran el Paseo de la Alameda en cada uno de sus extremos, los edificios que integraban el complejo de la exposición y los elementos ornamentales añadidos por Goerlich con ocasión de la prolongación del paseo hasta el Puente de Aragón. Dos décadas después de su colocación, las farolas presentan un deplorable estado de conservación, “luciendo” muchas de ellas desconchados en la pintura, grafitis y, en el peor de los casos, manchas de óxido y, en definitiva, ofreciendo una imagen de total dejadez y abandono, e impropia de uno de los enclaves más singulares, a nivel histórico y paisajístico, de la ciudad.
“Desde el Grupo Municipal Popular, consideramos que el Ayuntamiento de Valencia y, en concreto, la Concejalía de Gestión de Recursos, debería mostrar un mayor cuidado y esmero en la conservación del alumbrado público de la ciudad y de los modelos históricos en particular, procediendo, de inmediato, a la restauración y a la mejora del mantenimiento de los candelabros existentes en el Paseo de la Alameda”, ha declarado la concejala del Partido Popular, Marta Torrado, quien ha lamentado la política de rodillo del equipo de gobierno con las iniciativas presentadas por los Grupos en la Oposición.
“En otro orden de cosas, creemos que se debería modificar la ficha pormenorizada del Catálogo de Bienes y Espacios Protegidos de Valencia relativa a los jardines del Paseo de la Alameda, a fin de incluir las citadas farolas entre los elementos protegidos de este Bien de Relevancia Local, en atención a sus valores patrimoniales y al objeto de blindarlas ante eventuales actuaciones que, en aras de la eficiencia energética, desfiguren su estética, inseparable de la imagen histórica del propio paseo”, ha añadido Marta Torrado.