· El sindicato explica que este centro, que también tiene una baja sin sustituir, cubre 2.000 kilómetros de carretera
Valencia, 28 de julio de 2021
El sindicato CSIF reclama a la Dirección General de Tráfico (DGT) que cubra con urgencia tres vacantes de operador y una baja de jefe de explotación en el Centro de Gestión de Tráfico (CGT) de Levante. El sindicato alerta de la precariedad de la plantilla para afrontar la operación salida de agosto y explica que este centro abarca la Comunidad Valenciana, Murcia, Albacete y parte de la provincia de Cuenca.
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) señala que la relación de puestos de trabajo contempla once operadores y dos jefes de explotación; no obstante, tres plazas de operador están sin cubrir, por lo que, en la práctica, desarrollan su labor en el centro ocho profesionales. La situación se complica por la falta de cobertura también de los turnos de vacaciones, lo que provoca que en estos días haya seis operadores y del 15 de agosto al 15 de septiembre, únicamente cinco. Al mismo tiempo, la DGT no ha cubierto una baja de larga duración de jefe de explotación, por lo que solo hay uno en activo.
El sindicato hace hincapié en la importancia del Centro de Gestión de Tráfico, ubicado en Valencia, sobre todo en épocas como la actual de constante movimiento en carretera por desplazamientos vacacionales. En 2019 la operación salida de agosto contabilizó el tránsito de alrededor de un millón y medio de vehículos en la Comunidad Valenciana.
CSIF recalca la labor fundamental del CGT en la prevención de accidentes con, por ejemplo, sus avisos y señalización de paneles en las carreteras. Se encuentran en permanente colaboración con la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, fundamental para una respuesta rápida en cualquier accidente en carretera, hasta el punto de que su tarea podría definirse como “ojos de la Guardia Civil desde las cámaras”.
La central sindical urge a la Dirección General de Tráfico a cubrir las tres plazas de operador vacantes y la baja del jefe de explotación en un centro que supervisa alrededor de 2.000 kilómetros de carretera las 24 horas del día y que se enfrenta con una grave precariedad de plantilla al elevado movimiento de vehículos por las vacaciones estivales de agosto.