Valencia. 28 de mayo de 2021
La portavoz del Grupo Municipal Popular, María José Catalá, se ha mostrado “muy sorprendida que en plena crisis por la pandemia el alcalde Ribó decida cambiar la iluminación de su despacho con un coste de 17.200 euros y que se ha pagado de tapadillo a través de un contrato menor, algo habitual para evitar ir a concursos y poder darlo a dedo”.
Catalá ha denunciado que Ribó y su grupo Compromís “está más preocupado en iluminar mejor su despacho y en instalar un monolito para el 15-M que ha costado 20.000 euros que en dar solución y ayudas a las personas que están padeciendo la crisis por la mala gestión del COVID 19, especialmente a comerciantes, hosteleros y autónomos. A ellos les dan ayudas de 2.000 euros y se gasta cerca de 20.000 en poner más luz en su despacho”.
“Ribó está más pendiente de tener suficiente luz cuando se hace fotos en su despacho que preocuparse en solucionar problemas como la suciedad de la ciudad, la falta de aparcamiento público en el centro o las consecuencias para los comerciantes del centro de sus obras de peatonalización”, ha apuntado.
La portavoz asegura que “esta es la tónica del Gobierno del Ribó y PSOE, dilapidar el dinero que pagan los valencianos, ya que ha subido dos años los impuestos y tasas municipales. Además siguen incrementando el número de altos cargos en el Ayuntamiento para colocar militantes afines a Compromís y PSOE, el doble justo de los que tenía el Gobierno de Barberá”.