VALENCIA 07-03-2022.- El Gobierno de Ribó y PSOE tenía al cierre de 2021 un total de 154 millones de euros en las cuentas de los bancos, cerca de 75 millones más que en enero de 2020. La portavoz del PP, María José Catalá, ha advertido que “en plena pandemia el Gobierno de Ribó y PSOE acumuló cerca de 75 millones en los bancos y no los destinó a actividad económica. Ni bajaron impuestos, sino que los subieron y no destinaron ese dinero a ayudar al sector económico cerrado muchos meses y con nulos ingresos”.
Catalá ha hecho estas declaraciones antes de participar en el foro organizado por SOS Hosteleria, presidido por Fidel Molina. “El gobierno del Rialto siguen acumulando el dinero en los bancos demostrando que cada día es más nula la gestión municipal, que cada día hace un presupuesto más alto pero ejecuta menos al final de año y se niega a bajar la presión fiscal para que el dinero esté en el bolsillo de las familias, autónomos, hosteleros y comerciantes. Han rechazado todas nuestras propuestas pleno a pleno”.
En 2021 la nula capacidad de gestión del Gobierno del Rialto se tradujo el peor estado de ejecución del presupuesto desde que gobiernan. Sólo ejecutaron el 31,9% de las inversiones presupuestadas para los barrios de la ciudad. Sólo se han invertido 71,6 millones en la ciudad y se han dejado de invertir 152,4 millones de euros de los 224 millones presupuestados para 2021. Son cerca de 12 millones menos de los invertidos en 2020, donde se invirtieron 83,4 millones de euros. “Esta cifras demuestran que el Gobierno de Ribó y PSOE piensa cada día menos en la ciudad y que es un gobierno ideológico pero que no resuelve los verdaderos problemas de los vecinos”, señaló Catalá.
Catalá presenta su propuesta fiscal a los hosteleros
La portavoz del PP ha explicado en el encuentro organizado por SOS hostelería y que se resume, según ha manifestado, en “libertad económica”. “Vamos a hacer una revolución fiscal cuando lleguemos a la alcaldía porque creemos que hay que confiar en los autónomos y en el sector privado”, ha afirmado.
“Bajaremos los impuestos, reduciremos la burocracia para abrir un negocio, pondremos en marcha un plan de choque y haremos que Valencia vuelva a estar en primera división”ñ
Dentro de este plan fiscal ha anunciado una rebaja de 20% de tipo de gravamen IBI para todos los valencianos, una rebaja del 30% del tipo de gravamen para inmuebles destinados a la actividad económica que tributan por el tipo diferenciado, bonificaciones en el IAE y IBI para quienes fomenten empleo; las empresas que se quieran implantar en Valencia no pagarán los primeros 4 años el IAE; y bonificaremos en un 95% el impuesto de plusvalías para transmisiones de empresas entre familiares.
“Si implantan la tasa turística, no tengan ninguna duda que el Partido Popular la eliminará”, ha asegurado Catalá, quien ha denunciado “el afán recaudatorio del gobierno de Ribó y PSOE que cerró 2021 con la recaudación de impuestos y tasas más alta de historia, 451 millones de euros, frente a los 426 del año 2020.”. Eso implica que Ribó recaudo 25 millones de euros más que el año anterior, pero invirtió 12 millones menos en los barrios de la ciudad.
El Gobierno de Ribó y PSOE cada año presupuesta más pero ejecuta menos. “Han cerrado 2021 con un remanente de 80 millones de euros según Hacienda, lo que vuelve a demostrar el bajo nivel inversor de Ribó en la ciudad, y que prefiere que el dinero vaya a los bancos que invertirlo en los barrios de la ciudad”.
El pasado año vuelve a ser un nuevo ejemplo de la nula gestión del Gobierno de Ribó y PSOE. Cerró el año 2021 dejando de ejecutar el 68% de las inversiones presupuestadas para los barrios, es decir que sólo ha ejecutado un 32 %. De los 224 millones de euros que tenían que haber llegado a los barrios y pedanías, sólo han llegado 71,6 millones. Es el más bajo de la legislatura, en 2019 se ejecutó el 40,5% y en 2020 un 42%, y en 2021 sólo un 32%, diez puntos menos que el año anterior”.
Catalá advierte que es el grado de ejecución más bajo desde que gobierna la izquierda. “La falta de gestión es dramática y lo es porque las inversiones no llegan a los barrios y ni a los vecinos. Valencia está cada vez más sucia e insegura y Ribó sólo sabe que recaudar impuestos porque es incapaz de ejecutar las inversiones previstas”, ha señalado.
“Es verdaderamente preocupante. Con estas cifras ya sabemos que los presupuestos para 2022 son papel mojado porque Ribó se pone la medalla de que serán expansivos y superarán los mil millones pero a la hora de la verdad no sabe ejecutar ni un tercio de las inversiones previstas”, explica Catalá.