Valencia, 29 de septiembre de 2022 – Jesús Lorda
El presidente de Intercitrus, Enrique Bellés, ha manifestado en Radio Intereconomía Valencia: “Un escenario previsible y tranquilo genera confianza para impulsar la actividad económica”.
Respecto a la reforma fiscal anunciada por Puig el pasado martes, Bellés ha apuntado: “Se ha desmarcado completamente de la política de la Moncloa. Una cosa es que lo hayan hablado el fin de semana y otra que Sánchez esté o no de acuerdo con esta política”
“Puig ha conseguido muchísimas cosas. La primera ponerse en el escenario político porque está en todas las televisiones. La segunda contraponerse a la Moncloa y ya por último cubrir un escenario amplio dentro de la Comunidad Valenciana al que los otros partidos poco le pueden rechistar”, ha añadido el presidente de Intercitrus.
“Ximo Puig, como gran comunicador, dio el gran titular y cualquier otro tema del Debate de Política General queda en segundo plano”, ha sentenciado Bellés, que además ha recordado que desde la Unión Europea se están solicitando unas cuentas cuadradas para poder recibir fondos europeos, y por tanto se están pensando medidas en esta línea. No obstante ha considerado que más que una política fiscal, se ha entrado en una batalla fiscal.
Sobre la deflactación del IRPF, Bellés ha considerado que debería ser una cuestión bastante lógica. “Si hay una inflación alta y te van incrementando los ingresos tu poder adquisitivo es el mismo, por tanto, esa medida parece justa de entrada”, ha apuntado el presidente de Intercitrus.
En materia de transportes, Bellés ha lamentado: “No se entiede que no tengamos una comunicación digna Valencia-Barcelona, siendo la tercera y la segunda ciudad más grande de España”.
“Hay muchísimas obras que se tienen que hacer. Parece ser que por fin se van a soterrar las vías de tren de la ciudad de Valencia”, ha tratado el presidente de Intercitrus, quien además ha repasado proyectos como el de la Estación Joaquín Sorolla de Valencia, a priori, provisional.
“Con la última reforma de la PAC apareció como normativa exigir los mismos estándares de calidad para todos los países. Y eso lo aprobaron 700 eurodiputados, no solo los españoles”, ha explicado Bellés, que además ha incidido en que en la Unión Europea se le suelen pegar “muchas vueltas a la noria” en este tipo de cuestiones.