18 de julio de 2022
La portavoz del PP en el Ayuntamiento de Valencia, María José Catalá, ha pedido la paralización del proyecto de peatonalización del entorno del Mercado de Torrefiel por el rechazo que suscita entre los vendedores del propio mercado y los vecinos de la zona. “Ribó y el PSOE deberían escuchar a los vecinos y entender por qué no quieren este proyecto. Deben alcanzar un consenso y no imponer un proyecto en el que no han contado con los afectados”.
La portavoz popular, que ha visitado esta mañana la zona y se ha reunido con los comerciantes afectados, ha trasladado la preocupación de los vendedores del Mercado ya que con estas obras son 175 las plazas de aparcamiento que se suprimen “dejando sin alternativas tanto a los compradores que se acercan en vehículo como a la carga y descarga del mercado y perjudicando a los vendedores”, ha apuntado.
“No pueden malgastarse 700.000 euros que cuesta el proyecto de peatonalización sin contar con quien más se va a ver afectado. No es la primera vez que sucede estos problemas en los barrios de Valencia y Ribó debería rectificar”, ha apuntado Catalá.
Equipamiento sociocultural
Por el contrario, en el barrio de Torrefiel lleva paralizado desde hace más de dos años el equipamiento sociocultural de la plaza Obispo Laguarda con un presupuesto de cerca de tres millones de euros. “Esta es la contradicción, los vecinos no tienen esta dotación que es esencial para ellos y, en cambio, les presentan proyectos que no han pedido”, ha criticado.
Para María José Catalá, “nos encontramos con un barrio falto de equipamientos públicos, por ejemplo, hemos visitado un solar que presenta vegetación que supera el vallado e invade la acera, cuando llueve se encharca y presenta síntomas de abandono, falta de limpieza e insalubridad.”
Por último, ha recordado que con motivo de las obras de accesibilidad de la plaza Obispo Laguarda y la calle Cambrils se ejecutaron diversos pasos de peatones en cada una y en dos de ellos de esta última calle y en uno de la plaza no se han rebajado las aceras, por lo que son inaccesible para personas con movilidad reducida. “Esta es la Valencia de Ribó, faraónica en proyectos que no piden los ciudadanos y fallando en lo más fundamental, que las personas con movilidad reducida puedan usar un paso de peatones recién construido”, ha concluido Catalá.