El conseller de Hacienda y Modelo Económico, Vicent Soler, ha insistido en la urgencia de aprobar un nuevo modelo de financiación autonómico «que acabe con la infrafinanciación crónica de la Comunitat Valenciana» y ha incidido en que «hasta entonces el Consell estará legitimado para invertir los recursos que sean necesarios en garantizar unos servicios básicos de calidad, un estado del bienestar sólido y un gasto social por habitante similar al de la media española, con el consiguiente incremento de deuda que ello acarrea».
El titular de Hacienda se ha pronunciado en estos términos tras conocerse los datos de endeudamiento de las comunidades autónomas hechos públicos este jueves por el Banco de España y que elevan la deuda de la Comunitat Valenciana hasta los 53.820 millones de euros (47,8% del PIB), 53.170 millones (47,2% del PIB) si se descuenta el «efecto temporal del FLA React».
En este sentido, Soler ha reiterado «un incremento permanente de la deuda no es deseable» aunque ha asegurado que «si hay una obsesión que marque la actuación de este Gobierno es la de no discriminar a los cinco millones de valencianos y valencianas, por lo que hasta que haya un nuevo modelo de financiación no podremos más que recurrir a la deuda legítima para mantener un nivel de gasto en servicios fundamentales similares a los de la media española y cumplir con las obligaciones que emanan de la Constitución».
«No tenemos un problema de gastos superfluos, tenemos una falta clara de ingresos para hacer frente al mandato básico que la Carta Magna nos otorga en igualdad de condiciones a todas las autonomías», ha apuntado Soler, quien ha remarcado que «la evidencia es que un año más nos hemos visto obligados a recurrir al FLA para compensar la falta ya reiterada de ingresos que sufrimos».
«Entre la discriminación y la deuda legítima, siempre defenderé el derecho a una Educación, una Sanidad y unos Servicios Sociales de calidad para los valencianos y valencianas», ha asegurado el conseller, «y más todavía en un momento de recuperación social, económica y moral tras la COVID-19», ha añadido.
«Es evidente que este Gobierno no quiere ni desea que la deuda se incremente, ni que año tras año nuestro resultado presupuestario sea negativo, pero lo será mientras no contemos con unos ingresos suficientes para costear un estado del bienestar que, por otra parte, es cada vez más costoso para el conjunto de las autonomías», ha señadado el titular de Hacienda. Y es que ya ha advertido en numerosas ocasiones que la Comunitat Valenciana no cuenta con los recursos suficientes para hacerlo debido a la infrafinanciación crónica de la región.
El 74% de la deuda procede de la infrafinanciación
Soler ha recordado además que los últimos análisis del IVIE evidencian que de al menos el 73,6% se debe a la infrafinanciación que viene sufriendo la Comunitat Valenciana, «de forma que si se descontara este efecto, la deuda de la Administración Valenciana se situaría en torno a los 13.500 millones».
«Los datos sitúan que desde 2001, la falta de recursos ha generado cerca de 26.600 millones de deuda, a lo que se suma el encarecimiento de la prestación de servicios y el incremento de la población, que sigue sin actualizarse y también el coste financiero de la deuda», ha apuntado Soler, quien ha reconocido que «es una realidad que duele mucho contemplar, como conseller y como ciudadano valenciano, y a la que urge ponerle una doble solución: la del propio sistema de financiación, pero también -como se comprometió la ministra de Hacienda- la de la deuda histórica».
De hecho, tal y como ha reconocido el responsable de Hacienda, «si la Comunitat Valenciana no hubiera estado infrafinanciada, la deuda se situaría en el 12% de nuestro PIB en lugar de en el 47%. Por eso cuando la sociedad valenciana reclama de forma unánime un nuevo modelo estamos legitimados por la fuerza que ofrecen datos, que son irrefutables», ha indicado Soler.
«La infrafinanciación ha hecho que para mantener el nivel de prestación de servicios públicos fundamentales, el Consell se haya visto obligado a endeudarse. Nuestra prioridad, a diferencia de lo que ocurría en la anterior etapa de Gobierno, ha sido siempre garantizar una mejor sanidad aumentando la oferta de centros públicos, una mejor educación con más profesores de apoyo y unos mejores servicios sociales, garantizando la dependencia a miles de valencianos, por poner algunos ejemplos», según el conseller.
«Si la deuda aumenta en esta etapa es porque en un contexto de infrafinanciación y, sobre todo de pandemia, invertimos más en la ciudadanía y en mejorar su calidad de vida diaria», ha apuntado Soler.
Impacto temporal del FLA React
Según los datos publicados este jueves por el Banco de España, la Comunitat Valenciana registró al cierre de 2021 un incremento de la deuda de 3.013 millones de euros, 2.363 millones si se elimina el impacto temporal que en este ejercicio ha tenido, por primera vez, el adelanto de recursos del fondo europeo de recuperación React y que el Gobierno ha adelantado a las comuniadades autónomas que así lo han solicitado para poder llevar a cabo las actuaciones de lucha contra la crisis de la COVID hasta que los recursos sean certificados por la Unión Europea.
En concreto, si no se tiene en cuenta el impacto temporal del Fondo de Liquidez (FLA) React «que nos ha permitido a las autonomías disponer de la liquidez necesaria para acometer las actuaciones financiadas con React por adelantado», el incremento de la deuda en 2021 se sitúa en los mismos niveles que el incremento registrado en 2020. Así, frente al incremento de 2.367 millones registrados en 2020, 2021 habría registrado un importe ligeramente inferior de 2.363 millones de euros de incremento de deuda, y un crecimiento relativo del 4,65%.
Este incremento corresponde a las disposiciones del FLA de 2021 para financiar el objetivo de déficit del 1,1% (1.240 millones de euros); 1.109 millones por la financiación del exceso sobre el objetivo de déficit del año 2020, así como las liquidaciones negativas del sistema de financiación (91 millones de euros). A ello hay que sumar el incremento en 2 millones de las Asociaciones Público-Privadas (APP) no financiada por FLA; y una reducción (-80 millones de euros) en las operaciones de deuda a corto plazo de Tesorería y de ‘Factoring’ sin recurso.
A ello cabría sumar, el adelanto de 650 millones de euros que la Generalitat ha solicitado para el año 2021 de los 1.254 millones correspondientes a la Comunitat Valenciana procedentes del mecanismo de recuperación React y que el Consell amortizará al Gobierno central conforme las líneas financiadas con estos recursos sean certificadas por la UE.
Reducción del coste de la deuda valenciana
Igualmente, el conseller de Hacienda también ha puesto en valor el esfuerzo del Consell «por reducir cada vez más el coste de la deuda de la Comunitat Valenciana, que ya es una de las más baratas gracias a los esfuerzos por refinanciar las operaciones con entidades privadas, a tipos de interés inferiores a los del Estado a través del FLA».
De hecho, en los últimos cinco años, el Consell ya ha ahorrado más de 120.5 millones de euros en intereses de la deuda «lo que ha permitido reducir los costes de unos recursos que deberían llegarnos por vía del sistema de financiación, sin coste alguno, para atender el pago de nuestros servicios públicos fundamentales»
«El ahorro en intereses nos ha permitido destinar una mayor cantidad de recursos a gasto corriente para reforzar nuestra sanidad, educación y servicios sociales, pero también en mayores inversiones y en reforzar el apoyo al tejido productivo», ha apuntado Soler.