La vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, ha destacado que la Ley de Igualdad, cuyo borrador de anteproyecto está ultimando su departamento, se plantea «como una ley de clase que impulse un cambio en el modelo productivo», en el que se ponga en valor los cuidados «como elemento indispensable para la sostenibilidad de la vida».
Oltra ha presentado la campaña de la Generalitat para la conmemoración el próximo 8 de marzo del Día Internacional de la Mujer, con el lema ‘Cuidarse es feminista’, con la que se pretende reivindicar el derecho de las mujeres a «disponer de tiempo de calidad para destinarse al auto cuidado», porque «es muy importante cuidar, pero también cuidarse a una misma».
«Que las mujeres dispongamos de tiempo para dedicarnos a nosotras mismas no es una responsabilidad exclusiva nuestra, sino que debe existir una responsabilidad social y de las administraciones públicas en la labor de garantizar que los tiempos sean equitativos y que no sean siempre las mujeres las que asuman los cuidados», ha explicado.
En este sentido, ha manifestado la necesidad de un «cambio de paradigma que ponga las curas en valor», y ha señalado que este es uno de los objetivos que se plantea la ley valenciana de igualdad, que tiene previsto iniciar en breve la tramitación administrativa para la elaboración del anteproyecto, después de un amplio proceso de participación en el que se han recogido propuestas de 123 personas.
La eliminación de cualquier forma de discriminación, la igualdad de género con un enfoque transversal y la generación de políticas públicas que permitan a mujeres y hombres participar en condiciones de igualdad en la vida familiar, social, comunitaria y económica, son otro de los pilares sobre los que se basará esta ley.
Superar la brecha en los cuidados
La vicepresidenta ha explicado que la Generalitat asume la labor de «combatir la brecha en los cuidados», y por eso la ley plantea que las reducciones horarias para la crianza y los cuidados se amplíen en una hora diaria cuando las pidan personas del género infrarrepresentado en la demanda de medidas de flexibilización, que normalmente son hombres.
El desarrollo de un sistema público de cuidados es otro de los objetivos que se marcará la ley, que lo hará desde «una perspectiva ecofeminista que rompa con los roles y estereotipos de género y erradique las desigualdades sociales, culturales y de género».
Asimismo, se impulsarán bonificaciones fiscales a las empresas que incluyan medidas de compensación positiva al género infrarrepresentado, además de emprender acciones que permitan valorar los cuidados, como la elaboración de un informe anual sobre el impacto en el PIB de la economía de criar, cuidar y curar, lo que se conoce como ‘cuenta satélite’.
Políticas para la conciliación
Oltra ha indicado que la ley también promoverá el descanso en días festivos en el sector del comercio, especialmente en las grandes superficies, además de promover la jornada laboral de 32 horas, con el mantenimiento de derechos laborales y salariales.
Políticas de flexibilización horaria, así como presencialidad flexible y teletrabajo serán otras de las medidas que recoja la ley, junto con el establecimiento del permiso de las y los trabajadores públicos por nacimiento, acogida y adopción en un mínimo de 6 meses para familias biparentales y de hasta 12 en el caso de las monoparentales.
La ley también recoge la elaboración de una Estrategia de Usos del Tiempo que parta de una encuesta periódica sobre el tiempo que la población dedica a actividades diarias, que permita una redistribución del tiempo sin brechas de género.
Igualdad de género trasversal
La vicepresidenta ha indicado que el fomento de la coeducación en todas las etapas educativas será otro de los objetivos de la ley, para garantizar «un entorno que favorezca la elección libre y sin condicionamientos de las opciones académicas, especialmente en aquellas especialidades donde se detecten brechas de género».
El currículum coeducativo incluirá la adquisición de habilidades para la vida diarias siempre desde un enfoque de género interseccional, ha explicado Oltra, quien ha añadido que también se trabajará en la idea de que los productos de higiene menstrual sean de acceso universal, priorizando aquellos que son sostenibles medioambientalmente.
Esta visión de género trasversal también tendrá su repercusión en el ámbito urbanístico, donde las administraciones públicas estarán obligadas a incluir un informe de impacto de género con enfoque interseccional y con indicadores de sostenibilidad.
Premios Isabel Ferrer
La vicepresidenta también entregará esta tarde en Potríes los Premios Isabel Ferrer 2022 que el Consell concede a tres personas o entidades que hayan destacado en la lucha por la igualdad efectiva entre mujeres y hombres, y que este año son para la activista Carmen Soto, la ilustradora Viví Escribá y la Associació Dones de la Mar (ADOMAR).
La finalidad de este galardón es reconocer y premiar públicamente a aquellas personas y entidades que, desde un ámbito personal, laboral, social, institucional o cultural, han destacado por romper los prejuicios sociales y culturales que impiden a las mujeres ser iguales a los hombres o por su labor en favor de la igualdad.
El jurado de los premios Isabel Ferrer 2022 ha decidido premiar a Carmen Soto por «su trayectoria y compromiso» trabajando en Amnistía Internacional desde su creación en 1978, y por ser «una pionera en la defensa de los derechos de las mujeres».
En cuanto a Viví Escrivá, el jurado ha resaltado su trayectoria «impresionante en el ámbito de la ilustración» y su gran trabajo «en el fomento de la lectura entre las personas jóvenes».
Premio Nacional de Ilustración 2021, Viví Escrivá ha dedicado toda su vida a la ilustración, especialmente a la infantil, con un estilo muy personal. Forma parte indiscutible de la generación que en los años 70 marcó el rumbo del álbum ilustrado en España, en un momento en que comenzaba a despertar el sector editorial y muy especialmente el del libro para niñas y niños.
Por último, se ha premiado a ADOMAR por su lucha y esfuerzo por dar «visibilidad a las mujeres pescadoras en un sector muy difícil y masculinizado, donde trabajan faenando desde sus barcos».
La asociación se fundó en enero de 2018 por nueve mujeres relacionadas de una forma u otra con el ámbito pesquero, con el objetivo de que su trabajo fuera reconocido y conocido por toda la sociedad.