El alcalde de València, Joan Ribó, ha participado esta mañana en la jornada “Seguridad, salud y sostenibilidad: retos de la movilidad urbana”, donde ha reclamado de nuevo una mayor celeridad e implicación del Estado en la financiación de la transformación de la movilidad de València y su área metropolitana. “En el caso de las grandes ciudades –ha explicado Ribó- el éxito de la transformación de la movilidad depende fundamentalmente de la movilidad metropolitana. Y para ello es necesaria la colaboración y la actuación de otros niveles de la administración: el Estado y el Gobierno Autonómico”. Ribó ha asegurado que para València “ésta es una clara asignatura pendiente, porque la gestión de la movilidad en el ámbito metropolitano no depende del Ayuntamiento de València, pero la soportamos y padecemos”.
El alcalde de València ha tomado parte en la jornada, organizada por el diario El País, en la que ha participado la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, así como los alcaldes y alcaldesas de Gijón, Valladolid, A Coruña, Valencia y Córdoba. En este contexto, Ribó ha subrayado que, en el caso de València “el reto radica en abordar la movilidad a escala metropolitana”, y ha subrayado un dato revelador: los desplazamientos internos en la ciudad en coche (que comienzan en un punto de la ciudad y terminan en otro) rondan el 23%; en cambio, los desplazamientos externos alcanzan el 74%. “Para revertir esta tendencia, necesitamos trabajar a una escala superior a la ciudad, y necesitamos también seguir exigiendo la necesaria financiación al Estado para poder hacer frente a las inversiones necesarias”, aunque ha lamentado que “en ocasiones las ciudades sentimos que no se está actuando con la diligencia necesaria”.
El alcalde de València ha reclamado “más inversiones del Estado para la mejora de la red de cercanías de Renfe, que ha perdido el 40 % de sus pasajeros entre 2009 y 2019; y de la Generalitat para la mejora del Metro y del sistema de autobuses metropolitano, así como el impulso a los llamados carriles VAO, carriles metropolitanos de comunicación hacia la ciudad de València por donde circularían los vehículos con alta ocupación, y por supuesto los autobuses”.
Ribó ha coincidido con el resto de participantes en la sesión en la importancia de las ciudades para la transformación de la movilidad: son los lugares donde se concentran los grandes problemas de movilidad (emisiones, contaminación, congestión…), y al mismo tiempo son los grandes espacios de oportunidad donde implementar las soluciones.
Democratizar el espacio público
Durante el debate, el alcalde de València ha defendido el planteamiento de “democratizar el espacio público”, que pasa por ampliar los ámbitos urbanos para las personas que se desplazan a pie: “los desplazamientos peatonales suponen un 43%, frente al 23% en vehículo; sin embargo –ha señalado- el espacio público ha sufrido un proceso de ‘ocupación’ por parte del coche que hay que revertir, y recuperar los espacios para el uso ciudadano”. En este sentido, ha señalado el aumento de las zonas peatonales y verdes en la ciudad: 150.000 m2 en seis años; “y en un futuro muy próximo la plaza de la Reina sumará otros 11.000 m2. Especialmente significativa, ha sido la peatonalización de la plaza del Ayuntamiento, que a través de una actuación de urbanismo táctico ha pasado de ser una rotonda por donde circulaban 10.000 coches al día a ser una plaza de 12.000 m2 para uso y disfrute de las personas”.
“La política de movilidad en València se enmarca en el objetivo de convertir la ciudad en una urbe neutra en emisiones en 2030, y desde este Ayuntamiento continuaremos haciendo políticas para hacer la vida de las personas más amable y sencilla, y también para hacer una ciudad y un planeta más sostenible”, ha subrayado el alcalde. “El gran reto hoy es acelerar la transición climática, y las ciudades estamos llamados a desempeñar un papel fundamental”, ha afirmado. Y en esa política, el alcalde de València ha destacado también los otros dos ejes que configuran la base de la transformación de la movilidad urbana en la ciudad: el refuerzo y la potenciación del transporte público, y la apuesta por la bicicleta como medio de transporte alternativo.
Finalmente, el alcalde Ribó ha subrayado la importancia fundamental, a la hora de diseñar las ciudades del futuro, de la participación de la ciudadanía. “Es un elemento fundamental, y por eso en València hemos creado la Mesa de la Movilidad, donde están representados todos los actores relevantes en esta materia; y por eso gestionamos con una herramienta como los Presupuestos Participativos: de hecho, un porcentaje importante de los carriles-bici se han realizado a raíz de propuestas ciudadanas que, posteriormente, han sido apoyadas en estos procesos de participación, igual que varios proyectos concretos de recuperación de espacio público o de renaturalización. Esto muestra claramente cómo la ciudadanía está demandando una transición a modelos más sostenible de movilidad”, ha concluido el alcalde.