Valencia, 22 de junio de 2021- Diego Varea
15 meses han pasado desde que los ninots falleros llegaron al pabellón 1 de Feria Valencia. En el camino, momentos duros, tristeza e incertidumbre, pero el próximo 1 de septiembre todos estos monumentos se plantarán en las calles de la ciudad de València, símbolo de que vamos en camino hacia una nueva normalidad, y por fin, se podrá recuperar nuestra fiesta, la de todos los valencianos.
El equipo de Veus de Festa se trasladó hasta las instalaciones de Feria Valencia para realizar una edición especial, en la que se repasó como se vivió el momento de la cancelación de las fiestas y las previsiones del sector fallero para los próximos años. Bajo la dirección de Juanfran Barberá, Paco Romero, presidente de la Federación de Fallas de Primera A, Rafa Mengó, presidente de las Fallas de Sección Especial, y Antonio Escrig, presidente de la falla Grabador Esteve Cirilo Amorós, participaron en esta emotiva tertulia.
Al entrar al pabellón 1, Paco Romero ha manifestado sentirse “encantado por disfrutar de este olor, de estas sensaciones y poder ver estos ninots”, a lo que Rafa Mengó ha apuntado que “oler a madera y a corcho, te pone la piel de gallina y te redondea toda la felicidad”. Mientras que, para Antonio Escrig, “estar aquí dentro y ver a mi chica, emociona al observar todo este trabajo e ilusión guardada, que en breves saldrá a la calle”.
Pero antes de que llegasen todos los monumentos a Feria Valencia, llegó la noticia de la cancelación de las Fallas, a lo que el presidente de la Federación de Fallas de Primera A ha señalado que “se palpaba mucha tristeza en la que en muchos momentos se guardaban las lágrimas y era muy complejo tramitar esa situación, pero horas antes todos pensábamos que era imposible que se cancelaran las Fallas”.
A su vez, el presidente de las Fallas de Sección Especial ha expresado que “cuando estábamos en la calle y veíamos que se llevaban los monumentos, sumado al momento en el que nos dijeron que teníamos que estar en casa, cuando me quedé solo en el casal y cerré, lloré porque no sabía que iba a pasar”.
Por su parte, el presidente de la falla Grabador Esteve Cirilo Amorós ha indicado que “nos faltaban tan solo 2 contrarremates para finalizar la plantà, y a las 02.00h de la mañana convencí a nuestro artista para desmontar sin saber quién se iba a hacer cargo de esta operación, por lo tanto, días de mucha incertidumbre y tristeza”.
De hecho, los protagonistas han coincidido en que la decisión de trasladar los monumentos a Feria Valencia fue todo un acierto, ya que la temperatura es idónea para conservar en perfecto estado los ninots y la organización en la entrada y salida de estos ha sido muy eficaz, pero Antonio Escrig ha apuntado la problemática que se producirá en la salida de los ninots, sobre todo, de aquellos que primero salgan porque en agosto hay una temperatura elevada.
En estos momentos de caos y descontrol fue muy importante la interlocución con el ayuntamiento de Valencia, por lo que Rafa Mengó ha recalcado que “se ha visto una organización muy cohesionada del mundo fallero y llegábamos a la mesa de diálogo con mucha coherencia, en la que hemos conseguido muchas cosas”. Además, Paco Moreno ha expuesto que “debemos reconocer que hay mucha responsabilidad en los dirigentes políticos que toman las decisiones y las comisiones falleras hemos sido parte de la solución porque el comportamiento ha sido ejemplar”.
Por otra parte, se encuentra la situación económica de las comisiones falleras, en las que el presidente de Sección Especial ha explicado que “ahora en septiembre van a ser unas fallas distintas y van a ser de mucho gasto y poco ingreso, para reforzar las de marzo del 2022 pero las que me dan realmente miedo son las del 2023”, y ha dado gracias al Ayuntamiento por “ la subvenciones y ahora estar intentando rascar de donde sea para sacar partidas extraordinarias para el 2021 y 2022, que esta última será la que nos salve las fallas de 2023”.
En esta misma línea, Antonio Escrig ha valorado la problemática de que “hace un año se dijo que había un 10% de bajas y ahora creo que estará cerca del 20%, a esto hay que añadirle que muchas fallas no han cobrado la cuota íntegra, y el gasto se va a asumir como siempre, por lo tanto, creo que el ayuntamiento debería exponer la cifra de ayudas para poder realizar los presupuestos”.
Para ello, Paco Romero ha reivindicado la necesidad y función de los casales falleros ya que, “se acordó que habría una desescalada para abrir como centros culturales que somos y se nos ha quedado con horario de oficina, pero ahora en un momento en el que se va a poner todo en marcha necesitamos una ampliación de horario para preparar todo”.