Valencia, 13 de marzo de 2021.- Raquel Barba
El arte de engañar al karma es el último libro de la escritora valenciana Elísabet Benavent, autora de la saga Valeria, que se ha adaptado a la pequeña pantalla con una serie homónima en Netflix.
Elísabet Benavent ha estado esta mañana en el programa A Buenas Horas, dirigido y presentado por Miguel Ángel Pastor en la 107.1 Radio Intereconomía Valencia.
Elísabet ha empezado la entrevista explicando el porqué de su alter ego “Beta coqueta”: “Es mi alter ego en redes. Ahí se enseña solo una parte de nuestra vida y Beta es mi lado más social. Viene de un apodo que me pusieron mis amigas en el instituto”. Solo en Instagram la valenciana ya cuenta con más de 300.000 seguidores afines a sus novelas. Ese público es muy variado, y particularmente para ella la literatura “no tiene género. Las etiquetas crean más prejuicios en lugar de ayudar. Mis lectores son aquellos que dan la vuelta al libro y les apetece leerlo”. En sus lectores precisamente ha pensado siempre la autora a la hora de escribir los libros, en los que los personajes son muy volátiles en su personalidad y su estado de ánimo: “La vida es así: en una misma tarde podemos pasar de la carcajada al llanto. Los personajes son lo más parecido a la realidad para que el lector pueda ponerse en sus zapatos”.
Su nuevo libro El arte de engañar al karma es una comedia romántica en la que “se habla de muchas más cosas además del amor: de la amistad, del momento que pasamos y cómo se siente…”. La novela cuenta la historia de Catalina, una chica que ha pasado la vida formándose para ser actriz y que busca el papel para lanzarse al estrellato, “y más bien se acaba estrellando. Está a punto de dejarlo todo cuando un día encuentra unos cuadros y va al rastro a venderlos para sacarse un dinerito. No sé si el karma, la suerte o el cosmos le pone delante una oportunidad y se va a dar cuenta de que a lo mejor ella había estado esperando el gran papel de su vida para ser conocida, pero va a tener el gran papel de su vida y va a salir triunfante si nadie se entera de que está haciendo el papelón”.
El espacio lo sitúa en Madrid, pero el tiempo reconoce que es “un futuro distópico, pero para bien, donde la pandemia es una pesadilla superada y nos hemos quedado solo con el aprendizaje”.
El karma, como bien dice el título del libro, es uno de los protagonistas: “Está ahí como navegando durante toda la historia, aparece y desaparece”. Aunque ella no se define como muy supersticiosa para esas cosas: “No sé si creo en el karma. No creo que haya que hacer las cosas para que el karma te las devuelva, sino más bien hacer cosas buenas para dormir bien”.
Su andadura por los proyectos editoriales tardó un poco en llegar. Ella se trasladó a Madrid para estudiar el máster y encontró un trabajo con el que pudo quedarse a vivir allí. No obstante, no terminaba de estar a gusto, así que tras rechazar varios proyectos editoriales por falta de tiempo, decidió dejarlo todo y emprender su carrera como escritora. “Tenía treinta años, no tenía hipoteca ni hijos, así que si me tenía que equivocar, ese era el momento”, asegura.
Ahora no solo cuenta con veinte publicaciones sino que además se ha hecho una adaptación de Valeria a la pequeña pantalla. “Estaba en una comida de la editorial y me llaman para decirme que tenía que irme en ese momento a tomar un café con el director de contenido de Netflix. Yo no me lo podía creer. En un momento dado se levantó, me dio la mano, me dijo que estábamos en contacto… y un mes y medio después nos dieron la noticia de que se lanzaban a ello”.
